viernes, 30 de abril de 2010

Mi niña interna está interna...en el hospital.

Ya me estoy cansando de esta vida y sus hipocresías, sus frivolidades, sus estupideces.
No quiere decir que no me hubiera cansado ya varias veces, no quiere decir que antes no quisiera desaparecer de la faz de la tierra y observar desde otro plano con los brazos cruzados cómo el ser humano se destroza lentamente.

Llevo semanas queriendo escribir algo de lo que valga la pena hablar y no he podido. Ya es Día del Niño y no sé qué diablos hago aquí intentando opinar sobre la vida.

Sí, yo sé, estoy irritable, especialmente sensible, sientiéndome caer como Alicia en el túnel sin fondo, esperando que mis pies -o mi trasero, o mis narices- toquen tierra de una vez por todas.

Ya pasó el caso Paulette, algo de lo cual me resistí a hablar en su momento debido al asco que me dio semejante circo. Ya hubo más catástrofes naturales, más muertos "por error", más idioteces cometidas por las leyes mexicanas, más necedades del gobierno, más cosas por las cuales protestar y quejarse. La ley de Arizona contra migrantes mexicanos es lo más fresquecito, por mencionar un ejemplo.

Yo había pensado que quien estaba haciendo algo por sí mismo ya estaba haciendo patria, ya se podría decir que hacía algo por la humanidad, al hacerle el favor de ver por su propia vida y no endilgársela a los otros...pero aunque uno esté en el camino, hacen falta muchos huevos para no caerse a la primera de cambios.

Ya aguanté, resistí los embates del clima de mierda que me quema la piel y me hace sudar como puerco camino al matadero; traté de hacer oídos sordos a todo aquél consejo bien intencionado que me incitaba a dar el volantazo o de plano bajarme del auto y echarme a correr; intenté por todos los medios de hablar con gente que me impulsara con sus palabras y sus actos a sentirme valiente, guerrera, a no dejarme vencer por las circunstancias; enfrenté con humildad y paciencia el -profundo e inmenso- dolor de haberme enamorado -profunda e inmensamente- de alguien que jamás me amaría...quise hacer de cuenta que la falta de dinero no sería un obstáculo para realizar mis sueños... quise creerme grande, capaz, importante, especial...ingenuamente.

Hoy me rindo ante la evidencia: el país está en crisis, el mundo está en crisis. Es tan obvio como la homosexualidad de Ricky Martin, y tan ridículo como que yo me clave en tratar de decir que no es cierto. Tan fácil como decir que quise ser Gulliver y nunca lo fui, tan básico de explicar diciendo que Heidi amó a Bob Esponja y cuando viajó a Fondo de Bikini se dio cuenta de lo mucho que amaba Los Alpes...

¿Qué hacer entonces? Hoy me siento homo-sapiens-fóbica... por mis ganas de no tratar con nadie, de quedarme en la montaña y transmitir mis ideas a través del podcast sin estar segura de si alguien me escucha en el resto del mundo.



Esto es un impasse de pensamiento, hoy tengo obstruido ese tercer ojo del que tanto me jacto a veces. No sé si se vale o no, pero me vale, no puedo hablar hoy de nada. Me siento atada, con pocas posibilidades de hacer cosas... y aún quiero volar.

¿Han sentido antes cómo las alas pesan debido a que han viajado entre polución y se descubren llenas de plomo y otras suciedades? ¿Qué hacer para limpiarlas? ¿Cuánto tiempo hay que tomarse? ¿Hay que esperar a la otra luna? ¿Qué?

Hoy es Día del Niño y la niña que fui está enferma de muerte. Yace agonizante y yo la miro sin saber qué hacer, ni qué decirle, ni qué recetarle. Quisiera tomarla de la mano y llevármela a jugar conmigo...pero no quedan jardines seguros, no hay melodías perfectas, no hay nada que en su día pueda hacer para festejar un cumpleaños que cada año que llega, la va matando más.

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domingo, 4 de abril de 2010

Hoy fui fan de Edmeé García

Ilustración: Ragner Azcué

El día de ayer tuve el placer de presenciar una presentación de libro verdaderamente sui generis.

Y es que contando con el talento y el don de gentes de su autora, no podía esperarse otra cosa distinta.

'Mejor conocida en el bajo mundo' como la Diosa Loca Bestia, la autodenominada poeta-en-guerra-con-la-poesía, músico y pintora, nos regaló una noche de cachondería e irreverencia: nos regaló un trozo de su propio corazón.

El lugar elegido fue en Centro Cultural El Atrio, ubicado en una de las tranquilas calles de la colonia Roma. Debido a lo reducido del lugar, la entrada al evento se manejó por medio de invitaciones personales. La cita estaba fijada para las 19 hrs, aunque el acceso al lugar se dio aproximadamente media hora más tarde, una vez que los involucrados estuvieron más que listos.


Convocados a quedarnos en la banqueta, fuimos recibidos por el cuarteto de saxofones integrado por Raúl Ortiz Valverde, Fania Elizabeth, 'Roger' y la misma Edmeé García. Bajo el calor de una noche de primavera, como transportados a una vieja calle de Nueva Orleans, disfrutamos la bienvenida que después de la melodía nos dieron Rojo Córdova, Daniela Flores Serrano, 'Lala Mágica', Milliet Alcántar y Nara Pech, quienes personificarían en distintos momentos, las distintas personalidades de la Red Bitch, personaje creado y vivido por Edmeé durante la realización de su poemario.

Daniela Flores nos brindó una sensual actuación en corsé y stilettos de raso rojo, mientras recitaba tímidamente el primero de los poemas. Después le siguió la pasión de Nara Pech en una entrega total como la Tacha rosa mexicano. Luego vino la intervención de Rojo Córdova y su prodigiosa voz, quien prestó su cuerpo al tercer personaje de la historia, posesionándose literalmente de la poesía de su mejor amiga, y extasiándonos con sus sorprendentes dotes histriónicas.

Después de un par de intermedios musicales más, conocimos a 'Lala Mágica', vestida de ejecutiva ganosa, y a Milliet Alcántar, como la atrevida Narco-satánica terrorista recitando "Habemus lover", y haciendo partícipe del espectáculo al público masculino que no esperaba tal cercanía.

El cierre vino después de una ansiosa espera, por parte de la autora del "Señor del Sueño", quien despidió el programa con uno de los poemas consentidos de todos los que hemos tenido la fortuna de acercarnos a su trabajo artístico: "Autorreferente", mejor conocido como el verso que se repite tan sólo un par de veces en todo el texto: "Soy su fan", y que concluye así:


Soy más víscera que razón
Más ira que compasión
Más un aullido que una canción
Soy una Diosa Loca en un torbellino
sin ton ni son
Cuando se cansen de la radio, la influenza
o la televisión
Siempre tendrán una fan
y un lugar en el altar
de mi devoción


Edmeé está en su mejor momento (ya hasta una serie de televisión va a salir con el nombre de "Soy su fan"... ... ... ...por supuesto que no tiene que ver con ella, pero el cosmos la convoca por todos lados). Luego de un intenso trabajo para realizar este espectáculo y culminar con la edición exclusiva de su poemario El Red Bitch Project -sólo cincuenta ejemplares que se esfumaron como la espuma-, seguramente no dormirá en sus laureles. Los responsables de Mi Cielo Ediciones se anotaron un diez al publicar a esta poeta, pues el libro en cuestión no fue más que "un fetiche de arte objeto", tal como lo describen quienes lo concibieron más como un souvenir de una experiencia viva, que como un libro cualquiera que va a empolvarse al librero; pues de acuerdo a la ideología de la Diosa Loca, la poesía es palabra, voz, vibraciones.

Y esto es quizás lo que hace a esta mujer una artista verdadera, alguien que sabe que la poesía debe romper con su celda de papel para tocar la piel de los otros, desgarrarla, perforarla hasta penetrar al alma. Un pedazo de su propia camisa forraba la caja de unos cuantos libros -llamémosle 'Edición de Lujo'- que se quedaron en las manos de los que buscamos contagiarnos con un poco de su energía.

Porque es raro encontrar artistas que tomen el riesgo de vestir de rojo fuego y asumirse auténticos. Raro es el que se preocupa por asegurarse de que quienes apreciamos su arte, nos quedemos con un poco más: con las ganas de salir de noche, buscar al ausente, desgarrar con los dientes la envoltura del preciado canapé, -preservativos en charola plateada- y amar sin detenernos hasta la próxima luna llena...

¡¡Arrebatar de otras garras el corazón del que uno ama, el corazón que en noches como esta se extraña tanto, sumergirse en el abismo de sus ojos y asaltar el par de labios que regalan
maravillas...!!

...

Pocos artistas, al menos, logran eso en mí, a pocos les creo, con pocos me conmuevo como lo hice anoche con la Diosa. Mirar que quien trabaja ve materializados sus sueños es tan confortante como alentador. Recordar que para algo son los amigos, que cuando quiere hacerse, sin más, se puede, que no importa el tamaño de la herida, la suma de los fracasos ni los litros de llanto guardados, pues cualquier cadáver puede abonar flores...

Soy muy afortunada de haber conocido a esta persona, de haberme acercado, de haberme atrevido a procurarme su arte.

Soy su fan: Puerquita Valiente, Bombón Vudú, Bruja Cósmica, Fierecilla Salvaje, Bestia Sibila, Diosa peligrosa, Viuda del Fire y del Tibio, y de tantos otros.

Por la oportunidad cercana de coincidir en la escena, alzo mi copa y saludo. Hoy fui fan de Edmeé García. Muchas felicidades.
*